Escalando dificultades

Los colombianos enfrentan a diario diversas dificultades para subsistir y salir adelante todos los días, las oportunidades no son las mismas para todos y la injusticia y desigualdad social están por todas partes.


Por: Cristian Rodríguez Santos

@cristian930206 

Cristian Pasquel

@crispasquel

Las personas que sobreviven a pesar de las adversidades en este país son un ejemplo, y precisamente un ejemplo de perseverancia e insistencia es Flor De Luna Pazán, escaladora profesional y selección Colombia de esta disciplina deportiva.

¿Por qué Flor es un ejemplo?, hay que partir del hecho de que el deporte de la escalada no es muy popular en nuestro país, por lo tanto, los que practican esta disciplina deportiva no reciben mucho apoyo de los entes gubernamentales, por esta razón, los escaladores tienen que hacer sin fin de sacrificios para llegar a competir en un ámbito internacional, precisamente, este fue el caso de Flor De Luna.

Esta joven deportista de 21 años nació en Cali, desde hace 10 practica este deporte y desde hace 5 compite por el Valle del Cauca. En 2013 se hizo una competencia para escoger a las personas que integrarían la selección Colombia de dicho deporte en 2014, como resultado de estas pruebas, Flor De Luna quedó entre las mejores, dándole el derecho de representar al país en competencias internacionales.

Ahí empezó el esfuerzo de Flor. Para otra clase de deportes, los pertenecientes a la selección Colombia no tienen que colocar dinero para ir a representar al país en eventos internacionales, en el caso de la escalada no es así. En Septiembre de este año se realizaron los mundiales de escalada en Munich, Alemania y Gijón, España, razón por la cual esta joven tuvo que superar diversas dificultades económicas para poder asistir.

Lo primero que tuvo que hacer fue dejar a un lado, por un tiempo, el semestre en de la universidad, ya que debía aplazar muchas materias, y al de ver que ninguna empresa la quería apoyar, pues sencillamente, tuvo que recurrir al dinero del semestre para comprar los tiquetes de avión.

Después eso, tuvo que reunir los fondos necesarios para no pasar necesidades durante su instancia en Europa, para ello realizó diversas actividades, como hacer postres y salir a venderlos por las calles de Cali, vender de todo tipo de rifas, y por último, llegó a realizar múltiples fiestas en su propia casa.

Pasando por todo tipo de dificultades esta joven luchadora de nombre encantador, pudo asistir a los dos eventos mundialistas en España y Alemania, aunque no logró figurar en los puestos de privilegio, esta participación y el sacrificio de esta bella deportista, contribuyen para que en el país siga creciendo la escalada como disciplina deportiva. Flor De Luna Pazán sigue entrenando día tras día para superarse a sí misma y para en un futuro, no muy lejano, volver a representar con honores a Colombia en una disciplina deportiva en la que todavía falta mucho por aprender.

Enlaces:

 https://www.youtube.com/watch?v=_MALqq4km20&feature=youtu.be selección Colombia de escalada
 https://www.youtube.com/watch?v=LBi22AKvsK0 Record mundial de escalada en velocidad
 https://www.youtube.com/watch?v=ACz3L_Hgzxc campeonato del mundo de escalada.

PLAZA DE MERCADO DE SILOÉ: PÉRDIDA PATRIMONIAL

PLAZA DE MERCADO DE SILOÉ: PÉRDIDA PATRIMONIAL

Autor: Héctor Fabio Grueso.

Facultad de Humanidades y Artes

Es un ambiente caluroso se comercializa todo tipo de cachivaches como licuadoras, teléfonos, libros, y hasta ropa usada. Dejó de ser una plaza donde se vendían sólo frutas y verduras, debido a que para el mercado campesino ya no era negocio estar todos los días dentro de la plaza.

La Directora de Planeación Municipal, María Grace Figueroa, indicó que en el Plan de Desarrollo vigente para Cali sí se piensa mejorar las galerías, pero que hoy es un tema delicado porque no hay fallo sobre si son bienes de uso público, de Emsirva o bienes fiscales.

Los comerciantes argumentan que se encontraban aislados de las áreas donde hay más circulación de clientela que ahora acude a las grandes superficies que se han ido instalado alrededor de la plaza como Súper Inter, Olímpica y graneros de la comuna 20.

Honorio Palacios (50 años) es vendedor ambulante del sector de Siloé. Todos los días, se levanta a las cinco de la mañana con un propósito en su mente: poder seguir adelante con sus dos hijos de 6 y 8 años, que tienen que subsistir con la ayuda de su negocio de frutas y jugos naturales ubicado en la calle, diagonal al Súper Inter.

Hasta hace dos años, este vendedor ambulante hacía parte de la plaza de Siloé, pero ahora le va mucho mejor en la calle, donde los compradores están en constante movimiento.
“La cultura de la plaza de Siloé ha llegado al olvido debido a que la clientela no se ha ido renovando. Los hijos de nuestros clientes van a las grandes áreas como Cosmocentro y Súper Inter, porque para muchos de ellos, llegar a una plaza de mercado es un oso”, asegura Honorio.

Debido a esto, muchos de los vendedores que hicieron parte de la plaza se han apropiado del espacio público, donde nadie los molesta ni los desalojan.

A pesar de que se han hecho campañas para que los vendedores que ocupan el espacio público regresen a la plaza, todas ellas han fracasado. Incluso, en 2012, los directivos de la plaza negociaron con todos los comerciantes de alrededor de ese espacio patrimonial, para que volvieran y hicieran parte de él, dándoles a cambio dos meses sin cobrarles. Tan solo duraron dos días, debido a que la gente no se desplaza hasta la plaza para comprar, y estaban perdiendo su clientela y el espacio público que habían dejado abandonado.

“Una de las alternativas es que el municipio construya una plaza de mercado que esté bien ubicada y que todos los vendedores informales que están en la calle -que por lo general han sido de aquí de la plaza- reingresen a ella. Se matarían dos pájaros de un solo tiro, debido a que nos reubican en una parte competitiva y se limpia el espacio público”, propone Eliud Guarnizo, administrador de la plaza.

Por su parte, la Directora de Planeación Municipal, María Grace Figueroa, indicó que en el Plan de Desarrollo vigente para Cali sí se piensa mejorar las galerías, pero que hoy es un tema delicado porque no hay fallo sobre si son bienes de uso público, de Emsirva o bienes fiscales.

Mientras tanto, a Honorio Palacios el sol de las calles lo hace más fuerte. Él sigue a la espera de una solución, en pie de lucha con su venta de frutas, una rutina del día a día de muchos de los vendedores ambulantes de las calles de Siloé, para poder pagar el arriendo de la pieza y conseguir para la papita.

 …muchos de los vendedores que hicieron parte de la plaza se han apropiado del espacio público, donde nadie los molesta ni los desalojan.

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Sustitutos para el abandono, el caso de Mariana

La psicóloga Tatiana Torres analizó el caso de Mariana, que es también el de muchos jóvenes que delinquen en la ciudad. Para ella, es de relevancia el hecho de que Mariana fue abandonada por sus padres durante la infancia y creció con sus hermanos mayores y los abuelos.


 Por: Ana Julieth Saavedra y Kelly Callejas

@anajsaavedra

@kellycallejas

PU. ¿A qué adjudica Usted el comportamiento de Mariana y sus amigas?

R. Dado que la historia de vida de Mariana involucra constantes abandonos en la infancia, etapa caracterizada por una difícil transición, estos repercutirán en la manera en cómo ella lidiará con este proceso. En este sentido, se puede observar cómo el hecho de no tener un padre y una madre en su infancia, le niega los elementos necesarios para un reconocimiento temprano de su organización identitaria.

Ahora bien, tal ausencia de sus padres biológicos deja en ella un sentimiento profundo de abandono, el cual busca lidiar mediante su “independización” y su trabajo, ya que de esta manera no hay lugar para que la abandonen sus seres queridos, pues en el primer caso es ella quien decide abandonar su hogar y en el segundo, dado a que no hay afecto de por medio, no hay razón para apegarse ni sentir que la abandonan de nuevo.

PU. ¿Cómo reemplaza ella el cariño que no tuvo de niña?

R. En esta vía, ya que el abandono va acompañado por un sentimiento de vacío, Mariana busca llenarlo por medio de su adicción a las compras, lo que a su vez le sirve como un medio para lidiar contra el rechazo y el miedo que produce en la sociedad el hecho de ser un travesti y, además, ser prostituta.

Esta adicción, como cualquier otra adicción (en concordancia con el artículo sobre la cuestión de la adicción de Pedinielli & Bonnet, 2008), nace de una necesidad insaciable y como encuentro con una situación de la “desaparición de la parte insoportable, o de la aparición del sentimiento de corresponder con lo que se ha querido ser”.


PU: ¿Por todas estas circunstancias, ella termina encontrando un sustituto de ‘familia’?
R. Un punto clave en el relato de Mariana es el hecho de haberse ido de su hogar e ingresado a una pandilla -“Las Langostas”-. Esta pandilla, integrada por otros adolescentes travestis con un estilo de vida al margen de la ley, constituye un refugio en el cual se siente identificada, siente una especie apoyo por parte de sus pares en esta etapa de su vida tan difícil, como lo es la adolescencia.

Estas conductas de riesgo que asume -tales como irse de la casa, prostituirse, ser parte de una red de delincuencia juvenil-, en relación con lo que propone LeBreton, son el resultado del abandono temprano de sus padres, del sentimiento de vacío sumado a la incertidumbre en relación con el mundo -propia de la adolescencia-, de la búsqueda de límites y la intensidad de ser para encontrar un sentido a su existir.

Escarbando en el costal de los recuerdos de ‘La Mona’. “Me volví recicladora y soy feliz”

Luces y sombras de una mujer que con el reciclaje le ganó la batalla a sus demonios. Esa es ‘La Mona’, la señora que encontró la felicidad entre latas y desechos, entre plástico y cartón.


Por: Luisa Bolaños

@Lui19bg

No importa si el sol despertó con ganas de incendiar el pavimento de las calles de Cali o si un iracundo ‘San Pedro’ nubló el cielo y mandó un terrible aguacero. A Edith, nada de eso le interesa los lunes, miércoles y viernes, días en los cuales ejerce su trabajo.

En una piecita, dentro de algún edificio ubicado en “La Olla del Centro”, se despierta a las 5:00 a.m. para compartir el desayuno con su hijo de 23 años y su amigo ‘El ñato’.

Los piecitos de Edith caminan desde La Olla hasta el barrio La Campiña, mientras su cuerpo arrastra la carretilla que alquila por dos mil pesos. Al llegar, descarga su chivo para empezar a recorrer las calles.

‘La Ñata’ o ‘La Mona’ -así le dicen- es una mujer que mantiene una sonrisa en su rostro y transpira amabilidad. No siempre fue feliz con su realidad, pues como a muchas le ha tocado duro, pero como pocas les ha ganado la batalla a sus demonios. Ha triunfado a su manera, ¡a punta de cartón! y no con un cartón universitario, ni con millones en el banco; ha vencido en la vida por aceptarse, no avergonzarse y aportarle algo positivo al mundo, desde lo que hace.

‘La Colombianita’.

Quién iba a pensar que La Mona fue una jovencita de clase media que viajó al Perú, a sus trece años, junto a su padre y su madrastra. En ese país, su inocencia se vio atenuada por los intereses de la mujer de su padre o ‘La peruana’, como ella le dice.

“Mi papá era un borrachín y nunca me cuidaba. La peruana se aprovechó de que él no estaba y me lavó la cabeza, diciéndome que mi hermanito no tenía leche ni pañales y que mi papá era un irresponsable, entonces yo tenía que ayudarle con los gastos”, expresó La Mona.

La peruana, una ex estriptisera, “le iba a enseñar a hacer otra cosa para que la ayudara con los gastos” y hoy es la razón por la cual La Mona afirma que a los niños hay que protegerlos, para que no tengan que vivir lo que a ella le tocó.

“Me llevó a una ‘casa de negocios’ y se paró al lado de la puerta. Mientras yo estaba en una cama, en ropa interior, ella cobraba la plata. ¡Salíamos con las manos llenas! porque como yo era una niña, eso gustaba. A mí me decían ‘La Colombianita’”, comentó.

Pasaron los días entre estudios mañaneros y tardes en las que vendía su cuerpo, hasta que conoció a uno de sus clientes, que era gerente de la empresa Pesca Perú. “¡Tenía una pinta! A él le dio pesar porque le conté mi historia. Entonces, me regaló el pasaje ¡en avión! Y yo le hice firmar a mi papá el permiso”, recordó La Mona, con un fuerte sentimiento de gratitud.

Los ladrones de sus hijos: sus vicios.

La Mona de hoy no conoce de ambición ni derroche, pero a los 16 años, cuando fue recibida por su tía, quería plata y la forma más fácil de conseguirla fue continuar prostituyéndose por dos años más. “Ya venía con mis resabios, me había acostumbrado a tener plata”.

“Quedé en embarazo a los 18 años y como ya había cogido el vicio del trago, el cigarrillo y la droga, mi tío se quedó con el niño. Otro hijo quedó con mi papá y mi otra hija quedó con mi cuñada ¿Y yo? ¿Con qué me quedé? con el vicio”, manifestó con profunda tristeza.

Estaba derrotada por sus vicios y no parecía que la vida le fuera a dar la revancha. En las noches, su cabeza reposaba sobre el asfalto y sus días eran grises, hasta que ‘El Ñato’ la recogió, la llevó a vivir a una pieza y le enseñó las técnicas del valioso trabajo de reciclar.

“¡Qué vicio ni qué nada!”

“No volví a entregármele a hombres, comencé a reciclar, seguía metiendo, pero trabajaba y eso era un gran cambio. Luego vi que mis hijos iban creciendo y dije: ¡Qué vicio ni qué nada! Dejé todas esas cosas”, manifestó.
Nada pudo quitarle ese instinto de madre, pues sus hijos son el motivo por el cual, al terminar la mañana, camina desde La Campiña hasta la Chatarrería del Centro, con su carretilla cargada de cosas que para nosotros solo son basura, pero para ella significan “la comidita”.

Su sueño de ser secretaria, quizás lo esté cumpliendo archivando hojas de papel fino y periódicos. Hoy no puede divertirse bailando mientras le gritan: “¡Shakira!”, pero tiene algo más valioso que una diversión efímera, la pasión por lo que hace.

“El reciclaje para mi es hermoso ¡Es bendito! Vea, a veces, encuentro comida que dejan de las fiestas y la guardan en cajas; ¡ese día yo me doy una pachanga!, voy y caliento el arroz con pollo. Nunca me faltaron unas chancletas, un calzón, un brasier, una olla, nada. Tengo todo lo que necesita una persona, gracias a Dios”, comentó una Mona radiante e incluso más dichosa que muchos de nosotros, y agregó: ¡Yo soy feliz con mi reciclaje!”.

Diego Ayala, Fundador del grupo ‘En bici-Arte’

Lo que en un principio surgió sólo como la publicación en internet de fotografías que promovían una conciencia ambientalista, rápidamente tomó fuerza y es lo que ahora se ha transformado en un movimiento urbano a favor de la bicicleta, que traspasa los límites digitales y forma parte de una realidad en Cali, donde los ciclistas reclaman pacíficamente la creación de ciclorutas que cuenten con seguridad.

Por: Verónica Castillo

[email protected]

Diego Ayala, ambientalista y profesor de educación física, es un inconforme por la falta de vías seguras para los ciclistas. Es el líder y fundador de este proyecto urbano que lleva como nombre ‘En Bici-Arte’.

¿Qué es ‘En Bici-Arte’?
Es un movimiento urbano que tiene como objetivo la promoción del uso diario de la bicicleta, generando un cambio social a partir de un trabajo de conciencia tanto del ciclista como de los demás. Realizamos ciclo paseos, comenzamos saliendo a la bicicleteada sólo el último miércoles de cada mes pero debido al gran interés de la gente ha exigido que ahora se realicen todos los miércoles.

¿Cómo surge ‘En Bici-Arte’?
Comienzo a publicar fotografías de Internet en mi Facebook, reclamando al gobierno sobre la situación, sin embargo al poco tiempo me doy cuenta de que esto no daría ninguna respuesta, así que decidí dar un giro comenzar a publicar estas mismas fotos pero ahora promoviendo el ambientalismo y uso de la bicicleta como medio de transporte y es ahí cuando comencé a recibir respuestas favorables.

¿Qué promueve ‘En Bici-Arte’?
Principalmente el uso diario de la bicicleta como elemento benefactor del cambio social-ambiental; hay días en los que nos dedicamos a limpiar algunas áreas de la ciudad y tenemos un activismo pacífico mediante los ciclo paseos, con un sentido cívico pacifista.

¿Cuáles son los principales objetivos como grupo urbano?
Realizamos un activismo pacífico en favor de la exigencia de ciclo rutas seguras para transportarnos, buscamos que se genere un ambiente propositivo entre los integrantes del grupo, hacia un sentido de identidad, porque ‘En Bici-Arte’ lo conformamos todos y por tanto debemos pensar en un nivel distinto, proponiendo en lugar de sólo obedecer; así mismo, buscamos un reconocimiento del grupo por el gobierno y la sociedad en general.

¿Han buscado un diálogo o acuerdos con el gobierno de Cali?
No hemos gestionado ningún tipo de acuerdo con el gobierno, en un principio intentamos hacerlo, pero resulta sumamente difícil establecerlo, así que hemos optado por la apropiación del espacio, hacer cilclo paseos y en ocasiones plantones para hacernos presentes, que la gente y el gobierno sepa que existimos y queremos ser escuchados, haciendo uso de nuestra libertad de expresión.

¿Qué beneficios tiene andar en bicicleta?
La bicicleta tiene muchos beneficios, podemos hablar de una mejoría en la salud y el estado físico, ya que hacemos ejercicio al tiempo que disfrutamos del paseo