¿Para dónde va Palmira?
El 31 de agosto de 2015, al llegar a mi universidad, me encontré con varios jóvenes repartiendo volantes de la campaña política de John López, quien se postula al concejo de Cali y apoya directamente a Maurice Armitage para la alcaldía.
Por: José David Ortiz Peláez
Lo interesante del papel que recibí es que explica con frases cortas las funciones de un concejal, y me interesó porque no las conocía. Aprendí, por ejemplo, que son 21 los concejales que se eligen para representar los intereses del ciudadano, en este caso, de Santiago de Cali.
Después de posesionarse, se encargan de regular y controlar al alcalde y a su gabinete, de aprobar (o desaprobar) el Plan de Desarrollo que presente el mandatario, de brindar las normas para manejar el presupuesto de rentas y gastos, y reglamentar y aprobar otros acuerdos.
Es la primera vez que me encuentro en época de elecciones para alcaldía y consejo, desde que adquirí la mayoría de edad, y me llamó la atención el contenido del volante, porque es difícil hallar focos de información sobre las propuestas de los postulados para los votantes.
En Palmira (ciudad en la que resido) hay montones de vallas con las campañas de los candidatos que no contienen información sobre sus propuestas; solo encuentro en ellas el mero interés de ‘Usted debe votar por este partido y en por número porque sí’, y lo que es peor (para mí), por ejemplo, que a Jairo Ortega Samboní, al principal aspirante a la Alcaldía de Palmira, lo apoyan políticos como la exsenadora Dillian Francisca Toro, que no digo que esté mal, pero es cuestionable, debido a las investigaciones y demandas que tiene en su contra, entre ellas, una de su anterior abogado.
¿Para dónde va Palmira?, no lo sé; revisando el recorrido como concejal de Ortega Smaboní, se puede ver que ha sido una persona a quien apoya la ciudadanía (aunque no sabemos dónde quedaron sus proyectos) y que él, a su vez, apoyó al actual alcalde, Ritter López. De ellos dos parten amplios proyectos que benefician a los más desfavorecidos. Uno de los que más me llamó la atención es el proyecto ‘Kioskos Vive Digital’, que facilita la utilización de computadores e internet a estudiantes de colegios de más de 16 corregimientos de Palmira. Sin embargo, qué podemos pensar del camino de Palmira, cuando solo escuchamos el nombre de un político con toda una cadena de concejales que lo apoyan, sin tener oposición, y además, sin tener la competencia directa de algún otro postulado a la Alcaldía. Solo Ortega Samboní, y su partida de 21 concejales para manejar a Palmira, como si fueran los únicos por la ciudadanía.¿Es que acaso no hay otro aspirante a la Alcaldía?
PD: No estoy apoyando a ningún partido político. Muy irresponsablemente no inscribí mi cedula, por lo que no podré votar este año.