Un día con los diablos
El redoblante y la tambora, ‘La Culona’, con un colador de café en la mano te menea las caderas y te pide ‘la liga’ (dinero). Al fondo ‘El Diablo’ y ‘La Muerte’ se desmadejan en el baile. Ellos son los tradicionales ‘Diablitos’.
Comienzan cada año con el Festival de ‘Diablitos’, que se realiza desde el 30 de octubre y que busca dar apertura a esta actividad carnavalesca. Es un recorrido desde el sector de La Estrella (parte alta de Siloé) hasta el Parque de la Horqueta (en la Avenida Circunvalar)”.
Los niños salen a las calles de Cali a las seis de la mañana; los instrumentos y los disfraces son alquilados entre $7.000 y $12.000. Según cálculos de la Nueva Fundación, que trabaja con estos grupos, pueden recolectar en el día entre $30.000 y $50.000.
“Estoy saliendo de ‘Diablito’ desde el año pasado y lo que más me gusta es que almorzamos en restaurantes. Nos atienden porque pagamos con lo que nos ganamos en la calle, además recochamos”, cuenta Eduardo, uno de ellos.
No es fácil; “no es solo bailar, unas veces no recogemos nada, pero trabajo es trabajo y más si se hace con ganas”, agrega con una gran sonrisa.
Uno de los problemas que afrontan son los policías, ‘los ‘tombos’, como ellos los llaman, que no los dejan trabajar porque son menores de edad y se los pueden llevar a Bienestar Familiar.
‘El diablo Eduardo’, como lo llaman sus amigos, tiene 15 años y empezó este oficio desde los 11. Su sueño es poder estar en el Carnaval en la Feria de Cali, no como espectador sino como el bailarín El Diablo, el personaje que interpreta con ganas, por si algún día lo ven en la calle, le dicen que tiene talento y lo convocan para participar en ese evento.
Uno de los mejores días es el 24 de diciembre; es cuando recolectan más dinero, que les sirve para darle plata a la familia y comprarse la ropa de estreno
Javier Hinestroza interpreta el redoblante; comenta que en algunos sectores, la gente se molesta. Los mejores lugares para trabajar son los barrios La Base y Villa Colombia, y el centro.