“Pequeños cambios, grandes impactos: La importancia de separar tus residuos”
El manejo adecuado de los residuos sólidos comienza con una correcta clasificación. Conoce el sistema de colores de canecas y cómo puedes hacer una gran diferencia con pequeños cambios en tu rutina diaria.
Por: Adriana M.Mesa M.
adriana.mesa00@usaca.edu.co
Especialización en Marketing Digital
El peso de nuestros actos
Una persona puede llegar a producir en promedio 2 kg de basura por día, que se traduce en más de media tonelada de residuos sólidos por año.
¿Residuo o basura?
Un residuo puede ser “cualquier objeto, material, sustancia o elemento principalmente sólido, resultante del consumo o uso de un bien en actividades domésticas, industriales, comerciales, institucionales o de servicios, que el generador presenta para su recolección por parte de la persona prestadora del servicio público de aseo.” (Decreto 2981 de 2013. Por el cual se reglamenta la prestación del servicio público de aseo. Ministerio de Vivienda, Colombia ).
¿Cuál es la diferencia? Continúa leyendo.
De acuerdo con Montes, C. (2018), una parte de estos residuos tiene el potencial de ser recuperada y reincorporada en el ciclo económico y productivo, convirtiéndose en materias primas. Estos se consideran residuos sólidos.
Queda otra parte que no puede ser aprovechada, ya sea porque está contaminada, no hay interés por incluirla dentro de los procesos productivos o no existen las tecnologías necesarias para transformarla, estos desechos o basura, deben recibir un tratamiento diferente con el fin de eliminarlos y así minimizar sus posibles impactos sobre el ambiente. (Decreto 2981, 2013)
Lo que diferencia ambos conceptos es el valor potencial de recuperación que tienen los residuos sólidos y que se puede alcanzar por medio de una adecuada gestión que comience con la separación en la fuente.
¿Por qué es importante clasificar los residuos?
De acuerdo al World Bank Group (2018), Cada año, en el ámbito global, se generan 2.010 millones de toneladas de residuos sólidos. Si se mantiene el ritmo de crecimiento actual, esta cifra podría alcanzar los 3.400 millones de toneladas para el año 2050.
¿Qué podemos hacer? Entérate aquí.
¿Sabías que cada año son desechados más de 5.ooo millones de teléfonos celulares?, esta cantidad podría darle la vuelta al planeta unas 17 veces.
El vertiginoso crecimiento de la población mundial, una cultura consumista sumada a estrategias comerciales que priorizan la producción de bienes desechables, son factores que conllevan a que en las últimas décadas, las basuras se hayan convertido en un problema de contaminación impactando los ecosistemas y afectando gravemente el medio ambiente y la salud pública.
Frente a esto, todos tenemos cierto grado de responsabilidad en esta problemática, por lo que es necesario replantear el modelo orientado al consumo desmedido y empezar a introducir pequeños cambios en nuestros hábitos de vida
Al separar correctamente los residuos que producimos, estamos colaborando a que estos materiales con potencial aprovechable, puedan reincorporarse nuevamente por medio del reciclaje a las diferentes cadenas productivas y no finalicen como focos de contaminación en los vertederos y rellenos sanitarios, contaminando el agua, el aire y el suelo.
¿Qué va en cada caneca? Aprende a clasificar tus residuos.
En el año 2019, el Ministerio de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible expidió la resolución 2184 (que empezó a regir en el 2021) reglamentando el código de colores en bolsas o contenedores para la separación de residuos sólidos en la fuente. Si bien, se considera como obligación de los usuarios realizar la separación de los residuos, de acuerdo al PGIRS (Plan de Gestión integral de Residuos Sólidos) de cada municipio o distrito, una de las mayores dificultades para los colombianos ha sido entender que tipo de residuos deben depositarse en cada color.
El DNP (2022) menciona que en Colombia los residuos deben separarse de acuerdo a su naturaleza, ya sea en bolsa blanca (para residuos aprovechables) o bolsa negra (para residuos no aprovechables) como mínimo, el color verde se utilizará solamente si en la zona existe una ruta especial de recolección y posterior tratamiento. Los residuos especiales, peligrosos o de grandes dimensiones deben llevarse a lugares destinados para tal fin.
A continuación se ilustra una guía sobre los principales residuos que se generan en los hogares y su correcta disposición en las bolsas o contenedores de acuerdo al código de colores descrito en la resolución 2184. (Imagen: Minvivienda, 2020).
Recipiente o bolsa blanca
- Papeles: documentos de oficina, hojas de cuadernos, libros, prensa, cartulina, hojas impresas o de copias.
- Cartones, cajas, empaques de alimentos en cartón como los de la crema dental, cartones de jugo y leche.
- Bolsas de papel, papel regalo, platos y vasos de cartón plastificado (no contaminados), cubetas de huevos.
- Envases de vidrio (blancos, verdes, azules, ámbar)
- Botellas retornables y no retornables.
- Cristaleria.
- Frascos.
- Aluminio: latas, ollas, papel aluminio (limpio), perfileria de ventanales y puertas.
- Cobre: de color amarillo, rojo, cable rencauchado.
- Estaño, níquel, bronce, plata,
- Chatarra ferrosa: tejas, enlatados de alimentos, tapas de gaseosa y cerveza, ángulos, rieles, vigas, varillas, tuberías de hierro,maquinarias, rines, latas de vehículos, tarros, carrocerías.
- Botellas de plástico, garrafas, galones, canecas, tapas.
- Empaques de alimentos, dulces, galletas.
- Recipientes de cosméticos.
- Cajas o canastas de gaseosa, cerveza, fruta, verdura.
NO se deben incluir:
- Papel de fax, papel carbón, encerado, parafinado, papel higiénico, fotos, radiografías.
- Empaques de agroquímicos o sustancias tóxicas.
- Envases con bacterias patógenas.
- Vidrios de espejos, lámparas o restos de lámparas fluorescentes, cerámica, vitrocerámica, vidrios de ventanas, vidrios de acuarios, vidrios de automóviles.
- Partes con asbesto, cajas fuertes, material radiológico o radioactivo.
- Canecas con restos de químicos.
- Pipas de gas.
Recipiente o bolsa negra
Residuos ordinarios que no se pueden aprovechar como:
- Papel higiénico.
- Colillas de cigarrillo.
- Productos de higiene femenina.
- Papel de cocina, servilletas.
- Pañales.
- los tipos de papel que se excluyen en el listado de la bolsa blanca.
- Residuos de barrido.
- Los demás materiales que aún siendo reciclables, se encuentren contaminados o engrasados.
Recipiente o bolsa verde
Residuos orgánicos:
- Residuos de alimentos como frutas y verduras crudas, sus cáscaras.
- cáscaras de huevo, sueros de productos lácteos,
- Restos de café.
- Corte de césped, poda de árboles y jardín.
- Hojarasca.
Los residuos de alimentos preparados (restos de comida que hayan sido cocinados, guisados, fritos), para los que no exista ruta especializada de recolección o no se pueda usar como compost, debe ir a la bolsa negra.
Adicionalmente, cabe mencionar que existen otro tipo de residuos que presentan una gestión diferenciada, es decir, para su correcta disposición deben ser entregados en puntos autorizados o a gestores de programas de post consumo.