El surgimiento de nuevas promesas en el fútbol colombiano es algo cada vez más normal, lejos quedaron los tiempos en que se dependía de uno o pocos jugadores para marcar diferencia. El momento que atraviesa el jugador de moda en el país, Luis Díaz, es sublime al ser protagonista en un equipo élite de la mejor liga del mundo, el Liverpool; equipo histórico de Europa, ganador de seis Champions League. Sin embargo, este ejemplo no puede cegarnos de unos cuantos casos que prometieron mucho, pero al final quedaron en poco con relación a las expectativas. El fútbol ha adquirido un camino de doble vía a raíz de su fructífero negocio, hoy los jugadores deciden asegurar un futuro más promisorio en términos económicos, sin importar que se reduzca su reconocimiento deportivo.

Los tiempos modernos traen consigo grandes cambios, equipos que no eran considerados como grandes por su palmarés de título, hoy seducen a más de un futbolista con sus enormes fortunas; principalmente jóvenes promesas, es en estos casos donde los jugadores, en su mayoría suelen renunciar a ese sueño tradicional de jugar en el equipo con más historia, a cambio de asegurar un excelente futuro financiero en clubes con menos renombre. 

Son varios los casos en que famosos jugadores, estando en un momento cúspide de sus carreras, deciden fichar por un equipo lejos de la élite competitiva, dejando varias interrogantes en los millones de aficionados del deporte más popular del planeta. En 2013, el jugador colombiano Radamel Falcao García era considerado el mejor delantero de la actualidad, jugaba en el Atlético de Madrid, equipo en el cual tenía la excelente cifra de 52 goles en 68 partidos, jugando en la Liga de España, una de las cinco mejores ligas del mundo según expertos. El traspaso de Falcao sorprendió al mundo del fútbol en ese entonces, en una millonaria negociación de unos 60 millones de euros e ignorando ofertas de otros grandes equipos europeos como el Real Madrid y Manchester United. Pocos entendieron por qué el delantero cafetero decidió cambiar la alta competencia en España, por un nuevo y arriesgado proyecto en el club del principado, recién ascendido en la liga francesa. Muchos dedujeron que el traspaso se debió a un asunto netamente monetario. En ocasiones, factores como óptimos ingresos, tranquilidad y cercanía a la familia, determinan muchas veces que nuestras decisiones encaminan más hacia la unión que al prestigio, y algunos jugadores son claro ejemplo ello. Tiempo después ‘El Tigre’ reveló que una reunión en secreto con el príncipe Alberto, fue el principal motivo de su decisión. Promesas desde ser el eje central del equipo hasta el ambiente de la hermosa ciudad francesa para sus hijas, fueron las que decantaron en dicha elección.

Hace cinco años, en 2017, se originó el fichaje más caro en la historia del fútbol, el brasilero Neymar, fichó por el Paris Saint Germain, procedente de un equipo élite, como lo era el Fútbol Club Barcelona. El fichaje se concretó por la escandalosa cifra de 222 millones de euros. Los aficionados españoles cuestionaron mucho a Neymar en aquel tiempo, tratándolo de ambicioso, interesado e individualista. Cabe recordar que en el club español estaba rodeado de otras grandes figuras como el argentino Lionel Messi y el uruguayo Luis Suarez, con quienes formaba una de las mejores delanteras del mundo. Por ello sorprendía que el brasilero ya siendo figura y rodeado de otras figuras, quisiera ir a una liga de menor nivel, lejos del principal foco competitivo. Fueron muchas las teorías a raíz de dicho fichaje, desde el sentirse eclipsado por algunos de sus compañeros, hasta su malestar de vivencia con la ciudad catalana.

La poca exigencia física y competitiva de ligas poco conocidas, logra que muchos jugadores creen un confort consigo mismos, liberándose de la fuerte presión mediática que los clubes élite y selecciones nacionales crean ellos. Lejos ha quedado el espíritu deportivo, el querer superarse a través de la exigencia que otorga una liga competitiva como lo es la inglesa, por el contrario, el jugador prioriza su continuidad de juego sin importar el nivel de dificultad de la liga en que se halle, optando en algunos casos por un margen mínimo de exigencia, pero sobretodo que le garantice excelentes ingresos.

El aficionado al deporte, desea ver jugadores cada vez más aguerridos, fuertes y veloces, siendo protagonistas en los mejores equipos. No obstante, muchos jugadores se pueden hallar en una idea completamente diferente, donde el mercado afecta y determina tanto sus preferencias como su mismo rendimiento de juego. No es un hecho cuestionable desde el punto de vista personal, pero sí decepcionante en el ámbito deportivo. El ver cómo el conformismo lucrativo supera cada vez más el deseo de competencia, trayendo como consecuencia jugadores con bajo nivel de juego, reflejados en los malos resultados tanto de selección como de equipos colombianos a nivel internacional.

En nuestra liga local también hemos sido testigos de algunos casos similares, en 2020, América de Cali se proclamó campeón del fútbol colombiano, su nómina era en mayoría de jugadores canteranos, siendo el joven Santiago Moreno, de 20 años, una de las grandes sorpresas de dicha competición. Para sorpresa de los aficionados, el jugador decidió dejar al equipo escarlata por el Portland Timbers, de la Major League Soccer en Estados Unidos. La gran tentativa de ser parte del primer punto, integrarse en una alta sociedad para un mejor futuro, pudo ser quizá el factor más decisivo para este joven, alejándose así del sueño de escalar de un club en otro hasta llegar al de mayor historia, de querer ser llamado a la selección Colombia y de querer ganar títulos de renombre.

El futbolista de 34 años Fredy Montero, actualmente jugador del Seattle Sounders, también en Estados Unidos, tomó una decisión parecida para su carrera, prefiriendo una vida estable en Norteamérica, declarando en una ocasión … “No jugué en el Real Madrid, pero sí jugué toda mi vida al fútbol”, haciendo alusión al dilema de la depreciación en el mercado de muchos futbolistas pertenecientes a equipos élites, pero siendo suplentes de sus propios compañeros debido a la alta competitividad que conlleva jugar en una liga top.

Siempre habrá aspectos a favor y en contra a la hora de tomar una decisión en un proyecto personal, algunos priorizan la estabilidad, ante todo, otros por el contrario van por el que para ellos es el premio mayor, el prestigio. En el caso del jugador del momento en nuestro país, Luis Diaz, de 25 años, existe la búsqueda de superación personal, el valor que otorga aquello para dejar un legado en la historia del fútbol de nuestro país. Dos enfoques diferentes de una misma carrera, en un mismo ámbito pero que al final se divide en nuestras propias convicciones.

Autor: Daniel Felipe Cubillos Erazo
Programa: Comunicación Social
Género: Ensayo
Curso: Escritura Argumentativa (Periodo 22A)